El Hyundai Inster 2025 no llega para ser un coche más, sino para romper moldes. En una época donde los utilitarios eléctricos son o muy caros o muy justitos, Hyundai se ha sacado de la manga una propuesta con mucho sentido. Compacto, práctico, bien equipado para su precio y con una autonomía que realmente sorprende. Una apuesta lógica que combina eficiencia, diseño simpático y un planteamiento muy usable.
Durante una semana hemos podido probar la versión siguiente a la más básica, el acabado Maxx, con el motor de 97 CV y batería de 42 kWh. La promesa de Hyundai es clara: ofrecer un coche urbano eléctrico accesible sin renunciar a la tecnología ni a la usabilidad. Y aunque a nivel de equipamiento básico se nota la tijera, lo cierto es que este Inster hace muchas cosas bien.
Pese a su planteamiento sencillo, el Inster consigue destacar en aspectos clave. Por ejemplo, la calidad de rodadura en ciudad, su frenada regenerativa bien calibrada o el sorprendente aprovechamiento del espacio interior. En un mercado donde la mayoría de rivales directos son o más caros (como el Renault 5) o más espartanos (como el Dacia Spring), este Hyundai se planta con una actitud muy equilibrada.
La prueba nos ha llevado por ciudad, carretera secundaria e incluso tramos de autovía. Y sí, lo confirmamos: este coche es perfecto para el día a día urbano, pero también aguanta el tipo cuando le pides un poco más. Te contamos todo lo que nos ha dejado este pequeño gran eléctrico coreano, que quiere ganarse tu corazón a base de lógica y eficiencia.
VIDEO PRUEBA en YouTube
El coche más pequeño de Hyundai… pero con el corazón más grande.
Análisis exterior e interior
El Hyundai Inster 2025 tiene un diseño que no deja indiferente. A medio camino entre un SUV compacto y un utilitario con ruedas grandes, el coche se presenta con una silueta alta, compacta y muy vertical. No tiene un diseño agresivo ni deportivo, pero sí un aire simpático que recuerda a los kei cars japoneses, con esos faros circulares y detalles cuadrados que lo hacen reconocible desde lejos.
En la versión Klass y Maxx no encontramos los faros LED ni las llantas de aleación llamativas de las versiones superiores, pero aún así se mantiene atractivo. Las llantas de acero con tapacubos están bien resueltas y los paragolpes con molduras negras le dan ese toque aventurero tan buscado en los SUV. Incluso detalles como la antena de tipo aleta de tiburón o los pilotos traseros en disposición vertical ayudan a rematar una estética coherente.
Por dentro, la historia mejora. Es cierto que los plásticos son duros y el diseño general es muy funcional, pero no por ello se siente cutre. Al contrario: todo está en su sitio, los ajustes son sólidos y los huecos portaobjetos están bien distribuidos. El salpicadero tiene formas simples, pero funcionales, y la pantalla digital cumple sobradamente con lo que se le pide. Un punto positivo es el selector de marchas en columna, liberando espacio entre los asientos.
La habitabilidad sorprende, y mucho. Es un coche pequeño por fuera, pero cuatro adultos viajan cómodos en él, incluso con algo de equipaje. La banqueta trasera es más espaciosa de lo que parece y el maletero ofrece unos 280 litros muy aprovechables. En ciudad es una delicia aparcarlo y moverse entre coches, pero por dentro da la sensación de estar en un coche del segmento B. Es, sin duda, uno de los mejores aprovechamientos de espacio del segmento A.
PRUEBA DINÁMICA
Al volante del Inster Klass nos encontramos con un coche extremadamente ágil. El motor eléctrico de 97 CV puede parecer justo sobre el papel, pero en la práctica entrega un par inmediato que lo convierte en una bala para la ciudad. Las salidas en semáforos, las maniobras de aparcamiento y el zigzagueo entre coches grandes son su especialidad. Tiene ese comportamiento de scooter urbana que tanto gusta en la conducción diaria.
La dirección tiene un tacto suave, muy asistido, ideal para moverse con soltura en ciudad. En carretera, aunque se nota algo más blanda, transmite confianza y mantiene bien la trazada. La suspensión filtra correctamente los baches, aunque si pasamos por resaltos o alcantarillas a alta velocidad notamos que el conjunto es algo seco. Eso sí, el equilibrio general es muy bueno para tratarse de un coche pequeño.
Una de las mejores sorpresas es el sistema de frenada regenerativa. No solo se puede ajustar en 4 niveles desde las levas del volante, sino que incluye una función “Auto” que adapta la intensidad en función del tráfico y la pendiente. Esto hace que podamos conducir con un solo pedal en muchos momentos, lo cual es genial para la eficiencia y la comodidad. Hyundai ha afinado muy bien este sistema, que incluso supera a opciones de marcas más caras.
En carretera y autovía el coche cumple, aunque no es su hábitat natural. Puede mantener sin problemas los 120 km/h y hacer adelantamientos puntuales, pero con algo de previsión. A partir de 100 km/h el ruido aerodinámico y de rodadura es perceptible, lo cual resta puntos al confort general. Sin embargo, no se siente inseguro ni inestable, lo cual es un gran logro en un coche tan corto y estrecho.
¿QUÉ NOS HA GUSTADO?
- Espacio interior sorprendente
- Consumo eléctrico bajísimo
- Frenada regenerativa muy completa
¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?
- Acabado Klass muy justo en equipamiento
- Sin Apple CarPlay/Android Auto inalámbrico
- Ruido en carretera a alta velocidad
IMÁGENES DISPONIBLES DEL VEHÍCULO PROBADO
En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes del coche probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!
Nuestra valoración
Veredicto Final
El Hyundai Inster Maxx 2025 llega como una bocanada de aire fresco en un segmento donde cada vez hay menos opciones. Con este coche, Hyundai ha apostado por una fórmula simple pero ganadora: ofrecer lo esencial sin complicarse. Tiene el tamaño ideal para la ciudad, pero también se defiende fuera de ella. Es ágil, eficiente, y más cómodo de lo que uno esperaría por su tamaño.
Su diseño simpático, su practicidad y su bajo coste de uso lo convierten en una opción excelente como primer coche eléctrico, como coche de diario o incluso como segundo vehículo para una familia. No es lujoso ni tecnológico en exceso, pero cumple con lo necesario. Y lo que ofrece, lo hace bien.
Además, el Inster juega con ventaja frente a sus rivales. Mejora claramente al Dacia Spring en acabados, conducción y tecnología, y aunque no es tan refinado como un Renault 5 E-Tech, sí es mucho más accesible. En resumen: un coche con los pies en la tierra y una cabeza bien amueblada.
Si buscas un eléctrico urbano que no cueste un riñón, que consuma poco y que esté bien pensado, este Inster es tu coche. Y ojo, que como primer paso hacia una gama más amplia, apunta maneras. ¡Nos ha convencido!
