Tras probar dos auténticas bestias urbanas cedidas por la marca SYM ahora es el turno de uno de los modelos de acceso a la marca taiwanesa. La Joymax Z+ llega para cubrir el hueco intermedio entre las maxiscooter y las rueda alta. Sus dimensiones contenidas y su buena habitabilidad son sus bazas más potentes.
En el mundo de las motocicletas, al igual que sucede en el ámbito automovilístico, los modelos Cruisym Alpha y Joymax Z+ 125 comparten plataforma y motorización. Sin embargo, cada uno tiene un estilo y posicionamiento diferentes. Mientras que el Cruisym Alpha se presenta como un GT deportivo, el Joymax Z+ 125 se dirige a un público más sobrio y discreto. Está diseñado especialmente para aquellos poseedores de la licencia de conducir tipo B, que no tienen acceso a scooters de mayor cilindrada, pero que saben exactamente lo que buscan y lo que no necesitan, como un panel de instrumentos digital o espejos deportivos unidos a la carrocería.
El SYM Joymax Z+ 125 se presenta como una elección inteligente, ya que ofrece toda la tecnología, ergonomía y rendimiento del Cruisym Alpha a un precio más asequible. Entra en la competencia de scooters enfocados en ofrecer una relación calidad-precio óptima, es decir, no es el más costoso, pero no tiene mucho que envidiar a los productos premium de su categoría. Tampoco es el más económico, pero se encuentra en un rango de precios más cercano a los productos de gama baja que a los de gama alta de la competencia.
El diseño pone como principal valedor las líneas de su frontal, agresivo y con garra, muy al estilo japonés. En el lateral las líneas se suavizan, enfatizando un fluir, una transición entre frontal y zaga, no vemos músculo, solo líneas curvas para aportar sensación de ligereza.
En la zaga vemos nervio, tres ópticas para recuperar la fuerza que veíamos en la parte delantera pero con un diseño más conservador, incluso los intermitentes son halógenos.
Resumiendo, la Joymax Z+ es grande y pequeña a la vez, depende del ángulo desde el que la mires.
VIDEO PRUEBA en YouTube
A medio camino entre las más grandes y las más urbanitas, la Joymax tiene lo mejor de cada mundo.
Dos cascos integrales caben sin problema bajo su asiento, su capacidad de carga es más que correcta.
PRUEBA EN CIUDAD
Parece que SYM sabe lo que hace y siempre crea modelos muy interesantes para el entorno urbano y la Joymax Z+ no se queda atrás. Su pequeño motor de casi 15 caballos se desenvuelve de maravilla, con un buen ritmo y una aceleración suficiente las vibraciones son escasas y las notaremos al ralentí.
SYM se enorgullece de su capacidad para desarrollar productos de máxima calidad sin incurrir en costos excesivos, ofreciendo a los clientes productos dignos de la etiqueta “Made in Taiwan”. Anuncian una potencia cercana a los 14 CV con un nivel mínimo de vibraciones, como se pudo comprobar durante la prueba dinámica. La calidad de los componentes también se refleja en los frenos y suspensiones. El sistema de frenos cuenta con una pinza radial de 4 pistones y ABS, lo que proporciona una gran capacidad de frenado con una sensación similar a la de una motocicleta de mayor categoría. La suspensión trasera, compuesta por dos amortiguadores independientes, se puede ajustar en 4 posiciones para adaptarse a diferentes condiciones de carga.
El motor monocilíndrico SOHC de 4 válvulas de la Joymax Z+125 está equipado con inyección electrónica Keihin, reconocida marca japonesa. Este motor deriva de la versión anterior Euro 4, pero ha sido adaptado para cumplir con las normativas Euro 5. Las modificaciones se centran principalmente en reducir la fricción de los componentes para lograr un menor consumo de combustible y emisiones de gases. Además, el motor cuenta con un tratamiento cerámico exclusivo de la marca, que contribuye a su rendimiento térmico.
Por lo tanto, podemos llegar a la conclusión de que la parte ciclo de la Joymax está más que a punto para recorrer la ciudad sin problemas.
PRUEBA EN CARRETERA
Como toda 125, el ritmo en autovía es escaso si pretendemos llegar a la velocidad de crucero y se sentirá más cómoda en trayectos interurbanos o de carreteras secundarias.
Es capaz de mantener cruceros a velocidades entre 100 y 110 km/h sin problemas. Aunque el motor pueda estar funcionando a un régimen alto de revoluciones, no se percibe ningún sufrimiento por parte del motor, ni en términos de sonido ni de vibraciones. Incluso al forzar la marcha, no se experimentan problemas en este sentido.
Sin embargo, al trazar curvas largas a alta velocidad con el acelerador a fondo, pueden surgir ciertos movimientos en el scooter. Estos movimientos no son preocupantes, pero es importante tener en cuenta que este tipo de conducción no es el uso habitual para el cual está diseñado el scooter.
El espacio de almacenamiento debajo del asiento es destacable, con capacidad para dos cascos integrales y algunos objetos adicionales. Si se instala un baúl adicional, la capacidad de carga se vuelve realmente amplia. Además, detrás del escudo hay una guantera de gran tamaño que puede acomodar guantes, una botella de agua de 500 ml y otros objetos pequeños.
La pantalla del scooter es ajustable en dos posiciones, aunque se necesita una herramienta para hacerlo. Esto significa que es necesario elegir la posición que más nos guste y dejarla fija en ese ajuste. Durante la prueba, se probó el scooter con la pantalla fija en la posición más baja y se encontró que proporcionaba una buena protección.
El pasajero también ha sido bien atendido, tanto en términos de comodidad del asiento como en la presencia de asas para agarrarse. Sin embargo, es importante mencionar que las estriberas pueden resultar un poco incómodas de sacar, ya que se requiere presionar cada una hacia adentro antes de poder extraerlas.
¿QUÉ NOS HA GUSTADO?
- Ergonomía
- Motor ágil
- Confort de marcha
¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?
- Acabados austeros
- Instrumentación obsoleta
VEREDICTO FINAL
La capacidad de carga y el confort de marcha son los dos puntos fuertes de la scooter de SYM, unidos a la posibilidad de ser conducida con el carnet de coche o el A1 la convierten en una opción más que interesante teniendo en cuenta un precio que no supera los 4.500€ con el descuento actual de la marca.
Puede no ser la más tecnológica o la más transgresora en su diseño, pero en supermotor consideramos que tiene el equilibrio perfecto para ser un producto redondo.
IMÁGENES DISPONIBLES DE LA MOTO PROBADA
En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes de la moto probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!
Nuestra valoración
