Al volanteEléctricosMonovolumenPeugeotVideos
Tendencia

Al volante del Peugeot e-Rifter 2022

¿Quién iba a pensar que iríamos en un furgón turismo eléctrico?

2021 fue el año que dio la bienvenida a una de las apuestas del grupo Stellantis para un segmento que se mantiene como gran opción para las familias que no quieren caer en los suv convencionales. El e-Rifter se presenta como la variante eléctrica del modelo destinado a pasajeros de la conocida Partner, variante profesional.

Peugeot nos brinda la oportunidad de probar un vehículo robusto, amplio y eficiente para la nueva era eléctrica.

Un coche familiar eléctrico con la línea de diseño propia de la marca movido por 136 caballos y 260 Nm

Análisis exterior e interior

¿Es una furgoneta comercial?

Es lo primero que podemos pensar al ver el Rifter pero nada más lejos de la realidad. Los detalles exteriores de la carrocería nos dan la pista para poder adivinar la función particular y familiar del Rifter, sus llantas de 17 pulgadas en acabado bicolor son las más apropiadas para su acabado GT, además, sus barras de techo y los paragolpes tienen cierto toque suv innegable.

El frontal nos recuerda al resto de la gama francesa gracias a una parrilla imponente y vertical unida a unas ópticas sencillas y agresivas, también es destacable las líneas de tensión que recorren el corto y horizontal capó del familiar galo. En el paragolpes nos encontramos unas formas suaves pero con carácter coronadas por una entrada de aire funcional en el centro de la pieza y unas luces antinieblas remarcadas por un plástico negro tambien visible en la zona baja, al más puro estilo offroad.

En el lateral nos encontramos una silueta de dos volúmenes ya vista en el Partner con unos pasos de ruedas amplios y musculosos enfatizados por unas líneas que recorren su contorno de manera acertada, de no ser por ellas contaríamos con un diseño insulso y poco llamativo.

En la zaga encontramos un portón completamente vertical acompañado por dos ópticas verticales de gran formato y tecnología led, la parte inferior va remarcada por un paragolpes voluminoso revestido con plástico negro adornado por una pieza central de color gris.

Pero vamos a adentrarnos en el habitáculo para apreciar el espacio que encontramos, sus formas favorecen un espacio amplio, limpio y luminoso gracias a la gran superficie acristalada que tiene. 

La fila delantera cuenta con un salpicadero robusto con líneas suaves y materiales resistentes y bien terminados. Aunque sea un modelo intermedio entre lo comercial y lo familiar seguimos encontrando el característico i-cockpit de Peugeot con un volante de pequeño formato achatado por arriba y por abajo y un cuadro de instrumentos elevado con la opción de encontrarlo con tecnología digital extra. En el centro del salpicadero encontramos una pantalla flotante de 10 pulgadas ubicada en un sitio inmejorable para evitar distracciones de la carretera.

Hablemos de confort empezando por la fila trasera. Contamos con tres asientos individuales y, por lo tanto, al mismo nivel de comodidad. Su mullido es algo duro y la posición de su respaldo nos provoca una posición demasiado erguida para encontrarnos cómodos. El espacio para las piernas es muy correcto con longitud suficiente para las rodillas y márgen para mover los pies bajo el asiento delantero, así como una altura libre al techo sobradamente holgada.

Sin embargo, en la fila delantera encontramos un nivel de confort más elevado, con unos asientos con buen mullido, regulables y con mejor sujeción lumbar facilitando encontrar la postura con facilidad.

Dentro de todo el espacio que encontramos en su interior cabe destacar el enorme maletero de 775 litros de capacidad mínima, su acceso es muy bueno gracias a un portón que sitúa su boca de carga muy abajo, facilitando la carga de objetos pesados o voluminosos. Además, podemos abatir cada uno de los asientos de la fila trasera de manera individual consiguiendo un piso enrasado y muy práctico, para abatirlos debemos acceder a la fila trasera, no se puede accionar desde el maletero. Junto al gran portón trasero también tenemos la opción de abrir el maletero a través de la luneta trasera, facilitando el acceso a pequeños objetos situados en la bandeja en su posición más baja.

PRUEBA DINÁMICA

Pero lo que más llama la atención del Rifter es su motorización 100% eléctrica, con una batería de 50 kWh es capaz de entregar una potencia máxima de 100 kW (136 cv) y un par motor máximo de 260 Nm. Unos datos más que suficientes para el día a día en carretera y ciudad.

La suavidad es patente a cualquier ritmo, al igual que el silencio que se saborea en su interior gracias a una insonorización excelente pese a las formas exteriores frente al viento.

Cuenta con tres modos de conducción para adecuar el coche a nuestras necesidades, el modo Power es el más enérgico, convirtiendo el acelerador en más sensible y juguetón, por contra la autonomía se ve mermada. También tenemos un modo Normal para una conducción desahogada pero sin excesos. Por último encontramos el modo Eco, más tranquilo y concienciado con la autonomía, reduciendo el gasto de la climatización.

Como ayuda extra, tenemos el modo B en el selector de cambio para aumentar la retención de motor y frenado para regenerar la capacidad de la batería, ayudando así a aumentar los kilómetros totales antes de recargar.

La homologación WLTP nos asegura unos 280 kilómetros de autonomía en condiciones óptimas de temperatura, ritmo, etc. Durante la semana de prueba el consumo ha sido algo superior ya que hemos probado todos los modos de conducción a toda clase de ritmos y trayectos, situando la autonomía en unos 180 kilómetros, varía mucho según el uso que le demos, pero se puede superar la barrera de los 200 kilómetros.

VIDEO PRUEBA en YouTube

¿QUÉ NOS HA GUSTADO?

¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?

IMÁGENES DISPONIBLES DEL VEHÍCULO PROBADO

En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes de la moto probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!

 

 

Nuestra valoración

Diseño exterior
Diseño exterior 70%
Diseño Interior
Diseño Interior 65%
Calidades del Interior
Calidades del Interior 60%
Motorización
Motorización 75%
Consumos
Consumos 75%
Puesto de conducción
Puesto de conducción 80%

Veredicto Final

El grupo Stellantis ha apostado por la movilidad eléctrica en todos sus segmentos y buena prueba de ello es el e-Rifter. Un modelo que aprovecha la plataforma comercial del Partner para ofrecer un espacio interior bien aprovechado aunando estilo, carácter y versatilidad para familias. Su gran capacidad de maletero, su confort de marcha y su motor eléctrico (con Etiqueta Cero incluída) nos convencen como alternativa familiar a los abrumantes suvs que copan el mercado. El concepto es un acierto, más de lo que parece.
Alejandro Murillo - SuperMotor.Online
Alejandro Murillo
Probador

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba

Bloqueador de anuncios detectado

Se ha detectado un bloqueado de anuncios, comprendemos que pueda resultar incómodo navegar por la web con anuncios, pero gracias a ellos podemos hacer nuestro trabajo y traer el contenido para que lo puedas disfrutar, te agradeceríamos mucho que lo desactivaras para continuar navegando por nuestra web. Gracias!