La marca española CUPRA ha sabido posicionarse en muy poco tiempo como un referente del diseño, la deportividad y la innovación dentro del universo automovilístico europeo. Sin embargo, el hueco de los SUV compactos híbridos enchufables aún estaba pendiente de conquistar… hasta ahora. El Terramar VZ PHEV llega para ocupar ese espacio, combinando lo mejor del ADN CUPRA con una propuesta ecológica y versátil.
En esta versión VZ, que representa el tope de gama, se apuesta por una motorización híbrida enchufable de 272 CV que quiere convencer tanto a los conductores más exigentes como a quienes buscan una alternativa eficiente para el día a día. Durante una semana lo hemos probado en diferentes entornos, desde ciudad hasta carreteras secundarias y autopistas.
Nos encontramos ante un SUV que rompe con la línea conservadora del sector, y lo hace con un diseño muy afilado, una autonomía eléctrica superior a los 100 km y un interior que, sin ser perfecto, sorprende por su enfoque digital y ergonómico. El Terramar no solo se conduce, se experimenta.
Y es que CUPRA ha querido que este modelo sea el principio de una nueva etapa, tanto por ser el último modelo que se fabricará en Hungría (junto al Audi Q3) como por introducir una nueva evolución estética que ya hemos visto en el Tavascan. ¿Quieres saber si este SUV enchufable está a la altura de su nombre? Abróchate el cinturón, que arrancamos.
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Deportividad CUPRA + autonomía real = combo ganador.
Análisis exterior e interior
Lo primero que llama la atención del Cupra Terramar es su presencia. Con una longitud que supera los 4,5 metros, este SUV se posiciona justo por encima del Formentor, marcando un salto generacional en estética. El frontal tiene un aire a “tiburón enfadado”, con líneas tensas, faros Matrix LED triangulares y una parrilla muy horizontal que transmite anchura. El capó abombado y los marcados pasos de rueda refuerzan esa sensación de potencia contenida.
En el lateral encontramos una silueta dinámica, con una línea de cintura ascendente y unos voladizos cortos que favorecen el aspecto musculoso. Las llantas, que pueden llegar hasta las 20 pulgadas, tienen diseños muy CUPRA: agresivos, técnicos y deportivos. No faltan detalles en cobre ni acabados oscuros que subrayan su carácter más radical.
La parte trasera remata el conjunto con una franja de luz LED que cruza todo el portón y un logotipo CUPRA también iluminado que, si bien puede parecer excesivo a algunos, le da ese toque diferenciador que muchos SUV generalistas no tienen. Además, el difusor trasero tiene una apariencia muy trabajada, incluso en esta versión híbrida enchufable.
Ya dentro, el habitáculo es un salto claro respecto al Ateca y toma muchas ideas del Tavascan. El salpicadero se estructura en torno a una enorme pantalla central de 12,9” que lo controla prácticamente todo, desde la climatización hasta la configuración de los modos de conducción. Justo frente al conductor, una instrumentación digital de 10,25” y un volante específico CUPRA con botones satélite para cambiar el modo de conducción o encender el motor.
El diseño del interior es moderno y envolvente. Los asientos tipo bucket opcionales con tapicería en tonos morados o cobre aportan un aire muy racing, y la calidad percibida ha mejorado respecto a otros modelos del grupo. Eso sí, todavía encontramos algunos plásticos duros en la parte inferior del salpicadero y en las puertas traseras. Además, el maletero pierde capacidad en esta versión PHEV, quedándose en unos 470 litros.
PRUEBA DINÁMICA
El apartado dinámico es, sin duda, uno de los más interesantes del Terramar VZ. Bajo el capó combina un motor gasolina 1.5 TSI con un propulsor eléctrico, sumando 272 CV y una entrega de par muy generosa desde bajas revoluciones. Lo más destacable es su autonomía eléctrica, que supera los 100 km en condiciones reales gracias a una batería de 19,7 kWh. Esto le permite afrontar trayectos urbanos sin consumir una gota de gasolina.
El paso entre modos híbrido y eléctrico es suave, casi imperceptible, y el cambio DSG de seis velocidades se muestra eficaz tanto en ciudad como en conducción más animada. Además, puedes seleccionar manualmente el nivel de retención del motor eléctrico desde la pantalla central, aunque habríamos agradecido unas levas detrás del volante para gestionar esta función de forma más intuitiva.
En carretera abierta sorprende su equilibrio. El chasis, la dirección y las suspensiones adaptativas ofrecen un control muy elevado del coche, lo que transmite confianza en curva sin renunciar al confort. El sistema DCC permite ajustar la firmeza de la suspensión en hasta 15 niveles, algo que es más propio de modelos deportivos de alto nivel que de SUV generalistas.
En ciudad se comporta de manera silenciosa, fluida y suave. El modo eléctrico es ideal para trayectos cortos y, si lo enchufas cada noche, puedes vivir prácticamente sin repostar en semanas. En autopista, el Terramar mantiene el tipo, aunque el peso adicional de la batería se nota si buscas aceleraciones intensas continuas. No es un GTI, pero tampoco lo pretende. Es, eso sí, uno de los PHEV más deportivos del mercado.
Además, el sistema de frenada regenerativa actúa de forma progresiva, permitiendo una conducción relajada sin brusquedades. La experiencia en general es muy positiva, tanto por comportamiento dinámico como por eficiencia. Sin ser radical, el Terramar VZ tiene alma CUPRA.
¿QUÉ NOS HA GUSTADO?
- Autonomía eléctrica real sobresaliente
- Diseño exterior atractivo y exclusivo
- Dinámica de conducción divertida para ser un SUV
¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?
- Maletero reducido en versión PHEV
- Controles demasiado centralizados en pantalla
- Precio elevado sin ayudas
IMÁGENES DISPONIBLES DEL VEHÍCULO PROBADO
En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes del coche probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!
Nuestra valoración
Veredicto Final
El Cupra Terramar VZ PHEV 2025 es mucho más que un SUV compacto con pegatina CERO. Es una declaración de intenciones por parte de CUPRA: electrificación sin perder el espíritu deportivo que los ha hecho destacar. Con su diseño afilado, su generosa autonomía eléctrica y su enfoque práctico para el día a día, este modelo se sitúa como una opción muy apetecible dentro del segmento de los PHEV.
Frente a rivales como el Peugeot 3008 Hybrid o el Toyota RAV4 Plug-in, el Terramar ofrece un paquete más emocional y personal. Puede que no sea el más barato, pero sí es uno de los más completos, sobre todo si valoras el diseño, la tecnología y el dinamismo.
La experiencia de conducción es muy satisfactoria, con un equilibrio casi perfecto entre deportividad y eficiencia. Además, CUPRA ha logrado dotar a este SUV de una identidad clara, sin caer en lo genérico.
Si buscas un coche familiar, electrificado, con estilo propio y capaz de sacar una sonrisa al conductor, el Terramar VZ debería estar en tu lista. Es el SUV que muchos esperaban de CUPRA… y la espera ha merecido la pena.
