En 2019 entró en el mercado español la marca Voge, la visión más premium del gigante asiático Loncin. Desde entonces se han centrado en modelos de baja cilindrada con buenos acabados y precios muy interesantes.
Esta semana le toca el turno a la 525 DSX la actualización de la trail de media cilindrada cuyo éxito ha sido notable en el último año.
La estética es uno de sus puntos fuertes, de eso no cabe duda, y es que desde China han puesto toda la carne en el asador con un diseño agresivo y lleno de nervios y aristas para enfatizar el carácter de la DSX.
Su frontal es imponente y aparenta ser una moto de más cilindrada y precio. El acierto se encuentra en su conjunto lumínico adornado por un pico de pato a la moda. En la parte inferior nos encontramos unas antinieblas perfectamente adaptadas al carenado y que potencian la agresividad.
Desde el lateral vemos lo abrupto de sus líneas, con un depósito que sufre una fuerte caída hacia el asiento que, con sus 830 mm al suelo, prometen una accesibilidad de primer nivel para todas las tallas.
La zaga tampoco decepciona, con un colín corto pero bien aprovechado, cuenta con un asiento para el pasajero de dimensiones suficientes para tener confort y una parrilla portaequipajes.
El detalle de diseño nos lo encontramos en el diseño horizontal de la óptica y la cola de escape con una rejilla que tapa la doble salida de manera muy racing.
VIDEO PRUEBA en YouTube
Su motor crece en cilindrada y recibe mejoras en respuesta y confort de marcha. Su diseño está a años luz de su antecesora.
Como buena trail, es una moto cómoda para poder recorrer largas distancias, su suspensión cumple a la perfección con su propósito.
PRUEBA EN CIUDAD
Los 190 kg en seco se manejan suficientemente bien para maniobrar teniendo en cuenta la robustez de la DSX. Su asiento está a 830 mm del suelo y la zona entre asiento y depósito es estrecha y facilita llegar bien con las piernas rectas.
La postura de conducción también favorece la conducción relajada gracias a un manillar elevado y ancho, por lo que la espalda va recta y los brazos ligeramente arqueados.
El asiento tiene un mullido muy bueno tanto para el piloto como para el acompañante.
El cuadro de instrumentos es enorme y su manejo es sencillo mediante los botones de la piña izquierda, la única pega es el brillo, cuando nos da algo de luz se hace bastante difícil su lectura.
Las estriberas están situadas en una posición correcta para llevar las piernas en ángulo recto.La DSX cumple con nota el apartado urbano, es ligera, con asiento bajo y con un motor dócil y lleno que responde de manera suave.
PRUEBA EN CARRETERA
Voge ha apostado por el segmento y no es solo por moda, han creado una moto hecha para viajar, con un bloque equilibrado que ofrece el límite de la potencia para el carnet A2 y un elementos de primer nivel como su doble disco delantero de 298 mm con pinzas Nissin o su horquilla delantera invertida firmada por KYB.
En cuanto a los neumáticos se han decantado por unos Metzeler Tourance, ideales para un uso mixto con predominancia del asfalto.
Cuenta con una pantalla de protección aerodinámica ajustable en dos posiciones, algo pequeña hasta en la posición más elevada, pero que cumple con su función principal, proteger pecho y cuello.
La electrónica se limita a dos modos de conducción en los que se experimenta una leve diferencia de respuesta en el acelerador, los ajustes de suspensión se realizan de forma manual. También cuenta con desconexión del control de tracción y del ABS, nada mal para sus 6.187€ al contado.
Es destacable su comportamiento en carreteras reviradas, su peso juega a favor y el manejo en curva se vuelve cosa de niños gracias a una potencia y suavidad en la justa medida para disfrutar del viaje.
El consumo medio que marcaba la moto al final de la prueba fue de 3,6/100 km, una cifra que si tenemos una conducción más deportiva puede llegar a los 4 litros, pero poco más, es un mechero. El depósito cuenta con una capacidad máxima de 16,5 litros, lo que nos permitirá recorrer cerca de 400 km antes de tener que parar a repostar, muy buena cifra.
El tarado de la suspensión es adecuado, suficientemente blando para afrontar trayectos largos de autovía pero con la firmeza necesaria para transmitir lo que ocurre en el asfalto.
La frenada también cumple con nota, sus Nissin funcionan bien y tienen la mordida necesaria para sentir seguridad en caso de frenada brusca.
¿QUÉ NOS HA GUSTADO?
- Diseño Premium
- Motor suave y con garra
- Confort de marcha
¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?
- Vibración en Parabrisas
- Instrumentación con poco brillo
VEREDICTO FINAL
Voge quiere brillar y sabe cómo hacerlo, su gama es atractiva y con precios competitivos y la DSX es su obra cumbre (de momento) un producto equilibrado con un diseño interesante, mucho cuidado en los elementos elegidos y con un motor duro, suave y potente.
En definitiva, la DSX tiene el mejor precio del segmento y se sitúa en la cumbre en cuanto a calidad. En las marcas más tradicionales tienen mucho que pensar para no ser barridos en ventas.
IMÁGENES DISPONIBLES DE LA MOTO PROBADA
En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes de la moto probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!
Nuestra valoración
