En un mundo cada vez más comprometido con la protección del medio ambiente, la descarbonización se ha convertido en una prioridad para las marcas de automóviles. Conscientes de la importancia de reducir las emisiones de carbono y fabricar vehículos más sostenibles, las marcas están dando pasos importantes hacia la producción de coches que contaminen poco o nada. Este enfoque es especialmente relevante para aquellos fabricantes que desean vender en el exigente mercado europeo, donde las regulaciones medioambientales son cada vez más estrictas.
En este contexto, Mazda está liderando el camino hacia la descarbonización con su última propuesta: el Mazda CX-60 e-SkyActiv PHEV. Este SUV híbrido enchufable marca un hito importante para la compañía, ya que introduce por primera vez esta tecnología en su línea de productos. Con el CX-60 e-SkyActiv PHEV, Mazda combina la eficiencia de un motor eléctrico con la versatilidad de un motor de combustión interna, ofreciendo así un vehículo con bajas emisiones y un menor impacto ambiental.
Pero Mazda no se detiene ahí. La marca ya contaba con el Mazda MX-30, un modelo completamente eléctrico en su gama. Y en 2023, Mazda dará un paso más hacia la descarbonización con el lanzamiento de una versión de este modelo con rango extendido, el Mazda MX-30 e-Skyactiv R-EV. Esta variante ofrecerá una mayor autonomía y brindará a los conductores una opción aún más sostenible y libre de emisiones.
Pero la apuesta de Mazda por la movilidad sostenible no se limita a estos dos modelos. En un futuro cercano, la marca tiene previsto lanzar el Mazda CX-80 PHEV, un SUV con tres filas de asientos que combinará la eficiencia de un sistema híbrido enchufable con la capacidad para transportar a más pasajeros. Además, a partir de 2025, Mazda tiene planes de desarrollar una nueva arquitectura sobre la cual fabricar modelos eléctricos en todos los segmentos del mercado. Este enfoque ambicioso demuestra el compromiso de la marca con la descarbonización y su visión de un futuro de movilidad sostenible.
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Un hibrido enchufable con un comportamiento impecable y con calidades premium.
Análisis exterior e interior
Mazda ha decidido dar un salto hacia la categoría de los SUV premium con su último modelo, el Mazda CX-60. Aunque sus rivales directos no apuestan por una diferenciación radical, el CX-60 destaca por sus rasgos distintivos y característicos de Mazda.
Desde su silueta, se puede apreciar la elegancia y deportividad que define al CX-60. Su largo morro se complementa con una parrilla de generoso tamaño, especialmente en este acabado Homura, que presenta un tramado hexagonal y un marco negro. Las ópticas delanteras son finas y se integran perfectamente en la parrilla. El paragolpes cuenta con entradas de aire laterales, de diseño llamativo y detallado.
Si nos enfocamos en el lateral del vehículo, notaremos que presenta formas menos curvas en comparación con otros modelos de Mazda. En este caso, se ha elegido el clásico color Soul Red de la marca, que resalta los reflejos y su tamaño considerable. En el acabado Homura, no encontramos detalles en plástico negro ni en los bajos ni en los pasos de rueda, lo que permite que la vista se mantenga fluida. Las llantas de 20 pulgadas, en negro a juego con los retrovisores, aportan un toque moderno y elegante.
El Mazda CX-60 tiene un voladizo delantero compacto y una longitud total de 4,745 metros, lo que lo hace 4 cm más largo que un X3, por ejemplo. Con un ancho de 1,890 mm y una altura de 1,680 mm, ofrece una presencia imponente en la carretera.
En la parte trasera, encontramos un diseño más conservador. El portón trasero, de apertura eléctrica, está rematado con un alerón que integra la tercera luz de freno. Las ópticas traseras siguen la característica forma de “L” de Mazda, en consonancia con las delanteras. En la parte inferior, el paragolpes alberga los catadióptricos y cuatro salidas de escape decorativas, aunque cabe mencionar que detrás de ellas se encuentran dos salidas de escape reales y funcionales.
El Mazda CX-60 destaca por su diseño distintivo y elegante, combinando rasgos propios de Mazda con elementos que le otorgan una apariencia premium. Es un vehículo que no pasa desapercibido y que refleja la visión de la marca en cuanto a estética y sofisticación.
Mazda siempre se ha destacado por el cuidado y la atención que pone en el diseño interior de sus vehículos. En el acabado Takumi, presentado anteriormente, se apreciaban detalles inspirados en la cultura japonesa, como texturas que imitaban al Kimono y auténtica madera de arce. Ahora, con el acabado Takuma, se busca crear un ambiente más oscuro y deportivo.
Aunque puede que el interior no sea tan espectacular como en otros modelos, los acabados siguen siendo de alta calidad. Desde las superficies superiores del salpicadero, las molduras de las puertas e incluso los laterales de la consola central, todo está diseñado con materiales suaves para evitar golpes en las piernas. Incluso las alfombrillas son más gruesas de lo habitual, mejorando la experiencia al entrar al automóvil.
El puesto de conducción sigue siendo distintivamente Mazda, con un volante redondo y una posición dominante sobre la carretera. Aunque no es tan dominante como en otros modelos, se puede estirar un poco las piernas, lo que ayuda a mantenerse firme en las curvas. Los asientos, aunque cómodos, no proporcionan un soporte demasiado firme al cuerpo.
El volante es ajustable en altura y profundidad, y los asientos tienen ajustes eléctricos. Es fácil encontrar la posición ideal de conducción. Además, el automóvil puede reconocer al conductor y, al indicar la altura, ajusta automáticamente el asiento, el volante, los retrovisores y la pantalla del Head-Up Display. Puedes guardar tu configuración personalizada, y cuando el automóvil te reconoce, carga tus preferencias, incluyendo la configuración del sistema de sonido y la climatización.
Por supuesto, no faltan las pantallas. Hay dos: una de 12,3 pulgadas para la instrumentación, que mantiene un diseño similar a otros modelos de Mazda, y otra de la misma medida para el sistema multimedia en el centro del salpicadero. Ambas pantallas tienen una buena resolución y un menú de navegación bastante sencillo que se controla mediante un mando giratorio.
Aunque la pantalla es táctil y compatible con Android Auto y Apple CarPlay, en muchos casos resulta más conveniente utilizar el mando giratorio en la consola central. Se encuentra detrás del selector de cambio y en esa zona también se encuentra el control para los modos de conducción y el botón para forzar la carga de la batería utilizando el motor de combustión.
El interior también cuenta con prácticos espacios de almacenamiento, como una zona de carga inalámbrica, un par de porta-bebidas ocultos y un cofre central forrado para evitar ruidos.
En la parte trasera, el acceso es fácil ya que las puertas se abren casi en un ángulo de 90 grados. Aunque el espacio es mayor que en un CX-5, no es tan amplio como se esperaría en un vehículo de su tamaño, especialmente en términos de espacio para las piernas. La altura tampoco destaca, aunque esta unidad cuenta con techo panorámico y no tiene una banqueta longitudinal que sí tienen algunos competidores, aunque los respaldos se pueden reclinar ligeramente.
Entre las cosas destacables se encuentran el túnel central que apenas ocupa espacio, las salidas de aire y las dos tomas USB-C. Además, los asientos traseros pueden ser calefactables, lo cual es una característica positiva.
¿Qué tal va de Maletero?
Uno de los desafíos comunes de los vehículos híbridos enchufables es la pérdida de espacio de carga debido a la ubicación de las baterías debajo del piso del maletero. Sin embargo, en el caso del Mazda CX-60, esto no es un problema, gracias a la nueva plataforma en la que se almacena la energía en pilas.
El resultado es un amplio maletero con una capacidad de 570 litros, lo cual es impresionante. Esto significa que tienes mucho espacio disponible para cargar todo lo que necesites, ya sea equipaje, compras o cualquier otro artículo que desees transportar.
La ventaja de tener una plataforma completamente nueva es evidente en el CX-60, ya que Mazda ha logrado optimizar el espacio de almacenamiento sin comprometer el diseño elegante y las líneas aerodinámicas del vehículo.
Con un maletero de 570 litros, el Mazda CX-60 se destaca como un SUV híbrido enchufable que ofrece una gran capacidad de carga, lo que lo hace práctico y versátil para satisfacer tus necesidades de transporte diario o para viajes más largos.
El Mazda CX-60 no solo ofrece una amplia capacidad de carga en su maletero, sino que también cuenta con características prácticas que facilitan su uso. Aunque el borde de carga puede estar un poco elevado, su diseño aprovechable y los detalles bien pensados compensan esta pequeña limitación.
Una de las ventajas del CX-60 es la anchura de la boca de carga, que supera los 1,08 metros. Esto significa que cargar objetos grandes y voluminosos resulta mucho más conveniente y sencillo.
Además, el vehículo está equipado con una cortinilla cubreequipajes que se abre junto con el portón trasero, lo cual facilita la visibilidad y te permite tener un mejor control de lo que llevas en el maletero.
Cuando necesitas más espacio de carga, los asientos traseros divididos en tres partes te brindan la flexibilidad para abatir los respaldos y crear un área más amplia. En esta configuración, el CX-60 ofrece una capacidad de hasta 1.726 litros de carga útil hasta el techo.
Para mantener la seguridad en el maletero, nuestra unidad contaba con una red que separa el habitáculo del área de carga. Esto evita que los objetos sueltos se desplacen y te golpeen en caso de una frenada brusca, brindándote tranquilidad y protección adicional.
PRUEBA DINÁMICA
Mazda continúa desafiando las convenciones en el ámbito mecánico y ha vuelto a hacerlo con el Mazda CX-60. Este vehículo ofrece opciones de motorización poco ortodoxas en comparación con sus competidores. Además de las variantes microhíbridas diésel, como el potente 3.3 con 200 o 254 CV, Mazda también presenta un motor de gasolina 3.0 de seis cilindros, una configuración que las marcas alemanas están dejando atrás. Y lo más destacado es que la marca asegura que estos motores cumplirán con la exigente normativa Euro 7.
En cuanto a la gama de propulsores del Mazda CX-60, las ventas comenzaron con su versión híbrida enchufable, el Mazda CX-60 e-SKYACTIV PHEV. Este modelo marca un hito para la marca, ya que es el primer vehículo de producción en serie de Mazda en contar con este sistema de propulsión. Combina un motor de gasolina 2.5 litros Skyactiv-G de cuatro cilindros e inyección directa, que genera 192 CV, con un motor eléctrico de 129 kW (175 CV). En total, el sistema entrega una potencia combinada de 241 kW (327 CV) y un impresionante par máximo de 500 Nm. Con estas cifras, el Mazda CX-60 se convierte en el modelo de producción más potente en la historia de la marca.
El enfoque poco convencional de Mazda también se refleja en la configuración del motor del CX-60. Se utiliza un motor de ciclo Atkinson para lograr una mayor eficiencia y, de manera interesante, el motor está colocado ligeramente detrás del eje delantero. Estas características distintivas demuestran el compromiso de Mazda en encontrar soluciones innovadoras y eficientes, reafirmando su posición como una marca que se atreve a seguir su propio camino en el mundo de la automoción.
El Mazda CX-60 cuenta con una transmisión automática de ocho velocidades que integra la unidad eléctrica, ofreciendo una conducción suave y eficiente. Además, este SUV híbrido enchufable viene equipado con tracción total i-Activ 4WD mecánica, lo que significa que utiliza un árbol de transmisión para transmitir el movimiento al eje trasero en lugar de depender de un motor eléctrico para impulsar las ruedas traseras.
Con un peso que supera las dos toneladas, en parte debido a las baterías, el Mazda CX-60 ha sido diseñado teniendo en cuenta el rendimiento en marcha. Las baterías de iones de litio tienen una capacidad de 17,8 kWh y funcionan a una tensión de aproximadamente 400 V. Están ubicadas en la parte inferior del vehículo, lo que contribuye a un centro de gravedad más bajo. Estas soluciones técnicas están diseñadas para mejorar el comportamiento dinámico del vehículo y ofrecer una experiencia de conducción excepcional.
Con una combinación de una transmisión automática de ocho velocidades, tracción total y un sistema de batería bien ubicado, el Mazda CX-60 ofrece un rendimiento en marcha eficiente y una conducción equilibrada. Estas características demuestran el compromiso de Mazda con la calidad de conducción y la ingeniería innovadora, proporcionando una experiencia de conducción placentera y satisfactoria en todas las condiciones.
Si tuviera que definir al Mazda CX-60 en una palabra, diría “firme”. Este SUV demuestra una gran solidez en varios aspectos, comenzando por su dirección. Si bien puede resultar dura al estar parado, esta característica contribuye a una sensación de precisión notable en curvas.
El rendimiento del CX-60 es impresionante. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 5,8 segundos, superando a sus competidores directos. La velocidad máxima se ha limitado a 200 km/h, y aún a esas velocidades, el vehículo sigue siendo estable y responde de manera predecible.
Una de las pruebas importantes fue evaluar los consumos de combustible. El CX-60 tiene una autonomía eléctrica homologada de 63 km, y es relativamente sencillo alcanzar los 55 km sin esforzarse demasiado en la conducción. Incluso con un ligero esfuerzo y utilizando al máximo el modo de frenada regenerativa, es posible lograr los 60 km de autonomía eléctrica. Sin embargo, me pareció un inconveniente tener que ajustar la regeneración eléctrica a través de la pantalla, ya que las levas tras el volante solo controlan el cambio y no afectan a la regeneración.
El vehículo admite potencias de carga de hasta 7,2 kW, lo que significa que se puede cargar por completo en menos de tres horas utilizando un enchufe de esa potencia. Esto lo convierte en una opción ideal para los desplazamientos diarios en modo eléctrico o para minimizar el consumo de combustible. Sin embargo, en viajes más largos, la dinámica cambia, y es aquí donde es importante conocer los modos de conducción para optimizar el consumo.
El modo por defecto es el “Normal”, que prioriza el consumo eléctrico siempre que no se superen los 100 km/h ni se acelere intensamente. A través del mando Mi-Drive en la consola central, se puede cambiar al modo “Sport”, que utiliza el motor térmico y el motor eléctrico como apoyo cuando sea necesario, convirtiéndose en un híbrido ideal para viajes largos. También se puede forzar el modo de conducción completamente eléctrico, incluso a velocidades de hasta 140 km/h. Por último, el modo “Off-Road” optimiza la tracción total y las ayudas electrónicas para avanzar en superficies resbaladizas.
En autopista, los consumos oscilan entre 7 y 8,3 litros por cada 100 km, dependiendo de si se inicia el viaje con la batería cargada y se utiliza de manera eficiente durante el trayecto. El CX-60 se destaca en autopista por su excepcional comodidad y una calidad de rodadura excelente. Sin embargo, no busca el completo aislamiento acústico y la sensación de viajar de forma aislada, sino que busca involucrar al conductor en la experiencia de conducción.
En carreteras secundarias, a un ritmo adecuado, Mazda demuestra su habilidad para ajustar los chasis de manera excepcional. La marca ha trabajado con la electrónica para mantener la estabilidad del vehículo, frenando ruedas y ajustando la suspensión. Esto es necesario, ya que el CX-60 tiene un peso considerable y se nota que es un vehículo sólido, aunque no es tan ágil como otros modelos de Mazda. A pesar de ello, sigue siendo rápido y ofrece un buen rendimiento incluso sin carga. Además, me ha gustado especialmente el tacto del freno, que está muy bien logrado para tratarse de un híbrido enchufable.
¿QUÉ NOS HA GUSTADO?
- Potencia y rendimiento
- Eficiencia energética
- Calidad de conducción y comodidad
¿QUÉ SE PUEDE MEJORAR?
- Peso y agilidad
- Limitaciones en la regeneración eléctrica
- Consumo en carretera
IMÁGENES DISPONIBLES DEL VEHÍCULO PROBADO
En todo nuestro proceso de prueba, realizamos una serie de galería de imágenes de la moto probado para que podéis descargar en vuestro dispositivo, muchas gracias por leernos!
Nuestra valoración
Veredicto Final
